Pauline Boulangerie - Ramos Mejía

Nos juntamos con otras dos foodies (Luli de @comeren.ba y Georgi de @yquevamosacomer) y nos fuimos a Ramos Mejía, nada más ni nada menos que para conocer Pauline Boulangerie. Probablemente si viven por la zona lo conozcan, pero sino les cuento: es un lugar recontra amplio, como una casa de té pero realmente tiene de todo: opciones para el almuerzo, meriendas, desayunos, brunch, y muchas pero muchas tortas y cuadrados dulces que son de lo más rico que hay. En la entrada tiene un pequeño patio con un par de mesas al aire libre, y luego al entrar está el mostrador con tooodas las delicias exhibidas (tortas, alfajores, budines, facturas, etc etc etc), y varias mesas y sillas e incluso un sillón de terciopelo turquesa, como si fuese un living algo vintage, todo muy coqueto y muy bien decorado. Más atrás hay otro espacio con más sillas, luego una especie de jardín de invierno techado, y por último el jardín principal al aire libre. Les dije, es enorme, y se llena!

Nos sentimos unas reinas con Luli y Georgi por toda la comida que nos trajeron, realmente fue una barbaridad, pero por suerte pudimos probar de todo y comprobar que sea cual sea la ocasión, Pauline es un lugar genial para visitar! Arrancamos por el brunch, que trae: 2 infusiones, 2 aguas frescas (elegimos limonada de menta y jengibre, y de manzana verde), huevos revueltos, bruschetton (elegimos el de salmón), chicken fingers, ensalada caesar, croque monsieur (tostado de jamón y queso con queso gratinado afuera), ensalada de frutas, un cuadrado dulce (elegimos la tota oreo), 1 viennoiserie (elgimos pain au chocolat). El precio es $650. Llegó nuestra preciada tabla de brunch y ya nos entró toda la comida por los ojos! La presentación es muy buena y vistosa. Lo que más me gustó fueron los chicken fingers (deliciosos y crujientes), la bruscheta de salmón (con alcaparras, riquísima!), y obvio la torta óreo que era una BOMBA de sabor total, con muchos pedacitos de galletita, y no era súper empalagosa sino todo lo contrario. Pero todo estuvo realmente rico y los ingredientes son originales en comparación a otros brunch. Mención especial también a ambas limonadas, muy bien hechas, frescas, y de buen sabor, y al pain au chocolat que si bien era chiquito y no llamaba la atención cuando lo probamos morimos de amor, el relleno del chocolate estaba perfecto, medio líquido y muy delicioso. Yo creo que la cantidad si bien está bien para 2, si van 3 personas (como nosotras) van a estar perfectas también.

Como se enteraron que somos expertas en french toasts, y como si no hubiese sido suficiente comida ya, al brunch le siguieron dos platos de french toasts con muuuuuucha crema y frutillitas naturales y ricas. QUÉ BUENAS QUE ESTABAN, POR DIOS! Entran inmediatamente a mi ranking de tostadas francesas. Eran bien grandes (3 unidades por porción), gorditas y esponjosas, para nada quemadas, y con un gustito a miel y canela impresionante, me encantaron realmente muy bien hechas!

Por último, y para terminar de explotar, probamos el combo "La hora del té" que sería como una merienda completa para comparitr. Incluye: Té en hebras Tealosophy o café, jugo exprimido, degustación de pastelería, pan dulce de la casa, sacramento relleno con pollo y otro con roquefort, sándwiches de miga de jamón y queso, tostaditos de lomito y cheddar, macaron, muffin, croissant relleno con crema pastelera o ddl, 4 mini cuadraditos dulces, y unas tostadas con queso y mermelada. Precio: $550. CERRAME LA 12 CON TANTA COMIDA! Otra vez, la presentación fue impecable, no sabíamos por dónde empezar! Probamos todos los cuadraditos dulces y damos fé que uno era más rico que el otro, pero mis favoritos fueron el de merengue y frambuesa (me fascinó!) y el cheesecake que estaba súper cremoso. Otra cosa que destaco fue el sacramento de roquefort, qué rico por Dios! Amé la combinación del dulce del sacramento y lo saladito del roquefort, me pareció excelente! Las tostadas muy ricas también, con varios tipos de panes, y el juguito exprimido viene en botellita lo que le dio un toque muy lindo a toda la merienda. Exquisito también el pan dulce de la casa con un gustito a anís muy rico. Impecable todo!

Gracias a todo el equipo de Pauline por la experiencia!

Dirección: Rosles 256 (Ramos Mejía)